Inserto en la ciudad de Valdivia, desde 1859 hasta 1960 este islote era la base principal de apoyo logístico de la compañía Naviera Haverbeck & Skalweit S.A.
En 1996 una empresa familiar compra la compañía y decide volver a reconstruir la isla y convertirla en un complejo turístico atendido por sus dueños, donde se quiso revivir el patrimonio cultural que tenía.
Hay que recordar que toda la costanera y la mayoría de las islas adyacentes a Valdivia se desnivelaron aproximadamente 2 metros, lo que provocó la pérdida total de terrenos a orilla del río y de patrimonio de esta zona, que en este lugar aún se pueden ver.
De hecho la isla también quedó en parte bajo el agua y estuvo así 36 años, hasta que fue recuperada mediante rellenos, tarea realizada por los propietarios de la isla.
Actualmente se sigue trabajando para recuperar las 20 hectáreas del islote. En este lugar se encuentran cabañas, cafetería y senderos de áreas verdes; así como ruinas de lo que fue la población de aquel entonces, donde aproximadamente 250 personas vivían antes del sismo de 1960, el más grande en la historia a nivel mundial.